Mango de Ducha

Uno de los accesorios que más se sustituyen en un baño es sin duda el mango de ducha, muchas veces llamado alcachofa. Es una de esas piezas que se pueden cambiar fácilmente y por bajo coste.

Tal y como avanza la sociedad, encontramos que muchas variaciones en las instalaciones de agua se deben a una mayor concienciación en el ahorro de este bien tan preciado.  

Así que podemos encontrar mangos de ducha que favorecen el ahorro de agua, otros que son muy prácticos para no mojarse le pelo, como la Llorona o algunos con diseños realmente innovadores.

Podemos distinguir los mangos de duchas en diferentes tipos. Los más sencillos suelen tener tan solo una posición unque los podamos encontrar con diferentes diámetros. 

Por otro lado, los más utilizados son los que tienen más de una posición. Donde acostumbra a buscarse una posición tipo lluvia, una más relajante y alguna donde con más presión podamos obtener una sensación de masaje. 

Luego nos encontramos una opción de teléfonos de ducha más minimalistas, con formas muy redondeadas o muy cuadradas, en estas instalaciones no se le quiere dar relevancia al mango de ducha y se busca que pasen desapercibidos.

Desde Orfesa buscamos dar solución a las problemáticas que pueden surgir a la hora de sustituir el teléfono de ducha. Muchas veces el soporte que tenemos instalado para colgar la alcachofa sujeta el mango, mientras hay ocasiones que es el propio mango el que se acopla al soporte. 

Así que disponemos de un amplio abanico de accesorios como el codo para mango de ducha, adaptable a los soportes más antiguos que buscan acoplarse al mango de ducha.

Por otro lado, tenemos flexos de ducha con acabado cónico para unirse con facilidad a los nuevos soportes. La última novedad respecto a los flexos viene por ser de plástico. 

Estos flexos son mucho más resistentes a los metálicos con manguera interior. Ahorrándose las averías en las conexiones en los extremos. 

La otra gran ventaja es la higiene, el hecho de no tener anillas hace que la suciedad no se pueda quedar incrustada en esas zonas de difícil acceso.

Por último, evitamos las típicas manchas de óxido en la bañera, el contacto del metal con el agua provoca que en el esmalte de la bañera aparezcan esas manchas tan características. Estos flexos plásticos no se oxidan olvidándonos así de esas marcas tan desagradables.

Si quieres descubrir todos estos artículos puedes encontrarlos en nuestra sección de baño, dentro de orfesa.net